INGREDIENTES:
2 Sardinas medianas.
Un taquito de Sandía.
2 Pétalos de tomate seco.
2 o 3 Fresones.
Aceite de oliva.
Sal Maldon.
Unos granos de comino.
Para el marinado…
Azúcar.
Leche.
Sake.
ELABORACIÓN:
En primer lugar limpiar las sardinas y ponerlas a marinar en un bol, con azúcar, leche, sake y sal, durante unas horas (3 o 4h).
Mientras que están marinando las sardinas, cortar las fresas y en láminas finas. Una vez que estén cortadas, liarlas en papel film y machacarlas, hasta que consigáis una textura de carpaccio muy fino. A continuación congelar el carpaccio de fresas.
Una vez que estén marinadas las sardinas y congelado el carpaccio de fresas, antes de proceder al emplatado, pasar por la plancha, previamente caliente, el taquito de sandía.
EMPLATADO:
Colocar en la base del plato, el carpaccio de fresas, a continuación la sandía, y encima de estas las sardinas marinadas; por último colocar los pétalos de tomate seco. Por último aliñar el carpaccio con aceite de oliva, sal, y unos granos de comino.
¡Truco del chef!
Añadir un poco de cebollino picado, y si además queréis potenciar el sabor del plato, machacar los granos de comino y espolvorearlos por el plato.