Esta semana se celebra el Día Universal del Niño, y en Melones el Abuelo queremos que este post de nutrición, vaya dedicado a los más pequeños de la casa.
Es muy importante que como familia llevéis una alimentación sana y equilibrada, y que vosotros, como padres, seáis el mejor ejemplo para vuestros hijos, incorporando en vuestra mesa, todos los nutrientes necesarios para alcanzar una dieta saludable.
Desde muy pequeños, los niños deben estar educados en “comer de todo”, ya que es la mejor forma de que reciban todos los macro y micronutrientes necesarios para que puedan llevar un crecimiento óptimo; por ello, los padres debéis detener en cuenta las necesidades energéticas de vuestros hijos, ya que durante la infancia estas necesidades son muy altas debido al crecimiento y desarrollo y a la gran actividad física. Hay que intentar que vuestros hijos comiencen el día con un desayuno completo y evitar que abusen de los dulces, las chucherías y los refrescos.
Debéis de tener en cuenta que hay alimentos que son imprescindibles para que vuestros hijos crezcan de manera saludable; deben de tomar todos los días lácteos, frutas, verduras, legumbres, pasta, arroz, y de manera alterna carnes, pescados y huevos, y siempre intentando hacer que disfruten comiendo y que perciban la comida como un momento familiar y divertido; la comida no es un juego, pero tampoco debe ser nunca un castigo.
Como nutricionista, os animo a que os unáis a vuestros hijos, y todos en casa practiquéis una alimentación sana y equilibrada, donde combinéis todos las texturas, sabores, olores y practiquéis distintas técnicas de cocina; incorporar a vuestros hijos a vuestra mesa y hacedles disfrutar de un momento familiar, aprovechaos del carácter curioso de los niños, y dejadles que prueben todo, siempre de manera paciente y con dedicación, puesto que muchas veces la educación nutricional de los niños, puede producir frustración en los padres.
Desde Melones el Abuelo, os animamos a que les deis de probar a vuestros hijos pequeños trozos de melón después de comer, deja que los niños disfruten comiendo melón con las manos, que descubran su sabor dulce y refrescante, y que hagan de este momento un hábito que el día de mañana sean capaces de transmitir a sus hijos.
Para terminar, una frase para reflexionar sobre la importancia de una buena educación, en este caso nutricional, en los más pequeños,
“Los niños son el recurso más importante del mundo y la mejor esperanza para el futuro”, John Kennedy.