Juan Ignacio Rico, Laura Mayol, Marta López, Adoración Martínez y Judit Mínguez son La Mano Robada, una conciencia colectiva y creativa cuyo magnetismo fotográfico y personal hipnotiza y nos conquista en el espacio-tiempo. Ahora mismo el Centro Párraga en Murcia tiene la suerte de hospedar a estos especiales residentes cuya fotografía, obra, discurso, autenticidad, luz que nos invitan a vivir una experiencia única que nos cambiará.
En su “Línea discontinua” en el espacio 02 del Párraga podrás formar parte de un apasionante proyecto, el de dar vida a este espacio de arte que la Mano Robada está agitando con una revolución del boca a boca donde tu muñeca será tatuada para que esa línea discontinua se vuelva continua y te lleve a conversaciones, a vórtices de energía, a agujeros de gusano pero sobre todo a vivir una emocionante experiencia creativa, artística, estética que te hará sentir profundamente vivo.
Cultivamos con la iridiscencia que irradian las miradas de la Mano Robada, con ese sentimiento colectivo de elegante belleza artística que nos traspasa, mañana nos gustaría compartir contigo charla, recuerdos, viajes, sueños…
Una línea discontinua…
Es un proyecto que en un principio consta de una serie de 5 escenografías, cada una de ellas pertenece al paso y al registro de un número de personas por el centro. Hemos conseguido completar la primera que equivale al paso de 25 personas, la idea es conseguir otra con 50, otra foto de 75 personas, 100 personas y 125 personas, este proyecto depende de las personas que vengan a visitarnos en el Centro Párraga y bajo el mismo subyace la idea de mover los centros artísticos, darles vida, la casa de La Mano Robada es una casa para todos donde puedes conversar, tomarte algo, sentirte cómodo, como en casa.
Un sueño por cumplir…
Tenemos una libreta de sueños, cada uno tiene el suyo propio y también tenemos sueños colectivos pero poder vivir de una manera creativa sería el top.
El arte…
Tienes que disfrutar de la experiencia, da igual si sabes de arte o no, lo importante es si esa acción, esa obra, fotografía, etc, te emociona, lo importante es emocionarte con el arte.
¿Qué ventajas tiene trabajar en colectivo?
Los diferentes puntos de vista, siempre proponemos ideas y la mejor es la que todos queremos, abrazamos y trabajamos en ella. Además, en un colectivo tienen que coexistir esa doble vertiente en la que unos te digan que estás loco y otros que te digan vamos a intentarlo se enriquece todo mucho más.
La autenticidad…
Hacer las cosas de corazón es ser auténtico. Complacerte con lo que haces y ya se irá sumando gente a lo que haces, hacer lo que te mueve, fluir es la palabra.
Transitar por…
La fotografía, el diseño, la escultura, la escenografía… la curiosidad nos mueve hasta para hacernos los uniformes, transitar los bares -risas-, transitar las inauguraciones de arte para apoyar la creación, vivir el arte…
Nuevos retos…
Llevar la luz de estudio al exterior, encontrar el equilibrio entre la luz natural y la artificial. Utilizar materiales de color iridiscente donde la luz se proyecte de una manera especial, capturar la luz del sol que se reflecta en ese color único, ahí y en ese momento. Somos curiosos así que queremos salirnos de la zona de confort de estudio y explorar localizaciones misteriosas, abandonadas, que la naturaleza haya hecho suyas, jugar con la línea del horizonte… queremos trazar un dibujo en el espacio y ver donde nos lleva.
El sentimiento que os mueve…
Sentir que somos familia, la familia encontrada, esperarnos para comer, tener en nuestra casa nuestras fotos de comunión, celebrar nuestras celebraciones falsas, respetar nuestra intimidad, saber que cualquier sitio donde estemos juntos es nuestro hogar.