Se acercan fechas muy señaladas en el calendario, ya tenemos aquí la Navidad, días de comidas, cenas, y porque no, de cafés, meriendas…Un sinfín de eventos que se dan cita alrededor de una mesa, y que normalmente compartimos en familia.
A raíz de las innumerables quedadas familiares que se producen este mes de diciembre, me he planteado la siguiente cuestión, ¿por qué no pueden darse estas reuniones todo el año? ¿Por qué cuando llega enero caemos en la rutina y dejamos de comer en familia?
Por estas cuestiones y otras muchas, desde Melones el Abuelo queremos animaros a que no sólo comáis en familia el mes de diciembre, sino que hagáis de vuestras comidas y cenas diarias, un momento de familia.
En mayo de este año, se realizó un informe por el Instituto Internacional de Estudios sobre la Familia, cuyo título es “Comer en familia: hacer de la rutina salud”, en donde se analiza el papel de las comidas en familia en la calidad de la dieta y en el control del peso corporal.
Comer en familia es una costumbre que se remonta a nuestros orígenes, puesto que son muchos los hallazgos encontrados que lo constatan, no existiendo ninguna sociedad en la que la comida no esté vinculada a celebraciones de cualquier tipo. Actualmente, existe evidencia científica que nos dice que comer en familia se considera un factor de prevención de ciertos problemas de salud, siendo relevante en ciertas etapas de la vida, como la infancia o la adolescencia.
En el ámbito de la Nutrición, existen numerosos documentos científicos, que asocian el acto de comer en familia con el seguimiento de una dieta más equilibrada y de mayor calidad, reflejándose este hecho en una mejor salud de la familia, en especial de los niños y adolescentes.
En Melones el Abuelo, queremos que disfrutes del melón durante todo el año y que sea el postre preferido en tus comidas o cenas, no tiene que ser Navidad para que compartáis todos juntos, puede ser lunes, y será la ocasión perfecta.
“Una buena familia, comienza con el buen ejemplo de los padres”.